Esta mañana me he llevado un disgusto (o llamémoslo enfado, más bien) monumental. Y la protagonista ha sido la escuela de idiomas.
¡Lo mejor del caso es que ni siquiera soy alumna de esta institución! Pero, aun así, ese retorcido sistema de matrícula que tienen se las ha arreglado para salpicarme y ponerme de un humor de perros.
los pobres incautos, haciendo cola
Vamos a ponernos en situación. Normalmente, cuando uno se matricula en la universidad, en una academia... ¡donde sea!, siempre existe la posibilidad de que la persona no puede acudir en la fecha señalada a realizar la matrícula. Entonces, lo más normal es autorizar a otra persona para que realice todos los trámites en nombre del futuro alumno. Bien, en la escuela de idiomas, esto es posible... pero sólo para entregar la matrícula, propiamente dicha.
El gran problema está en la adjudicación de plazas.
Porque, el día y hora que te han asignado para adjudicarte la plaza... ya puedes estar enfermo, sin poder levantarte de la cama, trabajando o en el extranjero de viaje. Porque, si no puedes ir tú, ya puedes rezar y mandar a un familiar en tu lugar con mil papeles firmados, la fotocopia del DNI... o lo que se te ocurra.
Porque, si no vas tú en persona, la plaza no te la dan.
Porque, si no vas tú en persona, la plaza no te la dan.
Y eso, señores, esta mañana me ha fastidiado excesivamente. Porque, por culpa de esa absurda política de matriculación, se me va a echar a perder (al 50%) una semana que iba a pasar tranquilamente con mi novio (que es el que tiene que hacer la matricula) en Bilbao.
Una semana echada a perder por culpa de media hora de trámites para ir allí, decir "aqui estoy" y que le digan la fecha de la matrícula. Que esto es ya el colmo: ir para que le digan que vuelva otro día. ¡Que para eso, se lo podrían decir por teléfono! Pues nada, por esa pequeñez administrativa, que, para mas Inri ha coincidido justo a mitad de la semana que podíamos pasar juntos (gracias, Murphy), la semana se queda reducida a 3 días. Casi nada, eh?
Para animar el asunto, nos avisan con apenas 3 días de antelación, con los billetes comprados, y sin dejar claro en ninguna parte cuánto hay que pagar, ni dónde. (Y que nadie salga ahora a defender a la escuela de idiomas, que muerdo!)
En fín. Fruto de mi cabreo me he tomado la libertad de escribir una petición en change.org, pidiendo que sea posible realizar el procedimiento de adjudicación de matrículas enviando a un tercero con autorización. Os dejo el link y os invito a firmar, a ver si cambian ya este sistema tan molesto e inoportuno que tienen:
Petición:Autorizar a terceros en el procedimiento de adjudicación de matrículas.
Una semana echada a perder por culpa de media hora de trámites para ir allí, decir "aqui estoy" y que le digan la fecha de la matrícula. Que esto es ya el colmo: ir para que le digan que vuelva otro día. ¡Que para eso, se lo podrían decir por teléfono! Pues nada, por esa pequeñez administrativa, que, para mas Inri ha coincidido justo a mitad de la semana que podíamos pasar juntos (gracias, Murphy), la semana se queda reducida a 3 días. Casi nada, eh?
Para animar el asunto, nos avisan con apenas 3 días de antelación, con los billetes comprados, y sin dejar claro en ninguna parte cuánto hay que pagar, ni dónde. (Y que nadie salga ahora a defender a la escuela de idiomas, que muerdo!)
En fín. Fruto de mi cabreo me he tomado la libertad de escribir una petición en change.org, pidiendo que sea posible realizar el procedimiento de adjudicación de matrículas enviando a un tercero con autorización. Os dejo el link y os invito a firmar, a ver si cambian ya este sistema tan molesto e inoportuno que tienen:
Petición:Autorizar a terceros en el procedimiento de adjudicación de matrículas.